Cinco y quince

 El lunes vuelvo al despacho. Encima de la mesa, un informe de doscientas cuarenta páginas sobre cambio climático. Estadísticas, gráficas, cifras que apuntan que para el 2700 la población mundial se verá reducida a trescientos millones de personas. Son las cinco y quince, despierto pensando en Pilar Bardem. Adiós, Pilar. Tantos recuerdos se agolpan en la memoria. Morir en la pública o en la privada, es lo de menos. En este país se afilan rápidamente los cuchillos, en aras de sumar o restar. Esta semana en mi edificio, dos fallecidos por cáncer. La "matria" que me parió. Tanta moralina y desfachatez para un país que presenta cada año ciento cuarenta mil desaparecidos. Que barbaridad. El ritual del café a estas horas. Belén duerme, los perros duermen, yo lo hago con desfases, sin reglas, no sé si para bien o para mal. He llorado pensando en Pilar, Javier, Penélope, la vida, de atrás hacia delante, y otros que ya se fueron, con los que paseé, reí, cené, amé. Curioso, extraño, este blog al que asomo la cabeza, que nadie sabe que existe porque escribo bajo pseudónimo. Nadie, bueno, tú, la única. Tú fuiste el motivo, la primera piedra. "Un método infalible para eliminar las hormigas en las casas, canela en polvo, o empapar algodones con vinagre y limón". Marta, puedes visitarme cuando quieras, chica. Mi hermana ayer apagó las velas, felicidades. Tras siete años divorciada vuelve a estar enamorada de un chico de la infancia. Un encuentro casual por la playa, hace tres meses y juntos, dos guindas en el pastel. Jesús continúa viento en popa con "la chica de la capa", que abandonó Holanda para venirse a Madrid. Viven de alquiler en Lavapiés. La magia conduce a todo tren. "Haz algo extraordinario, en eso consiste la vida". Escribo lo que pienso, lo que vivo, lo que siento y callo, lo que callo, tanto y tanto. No podría ser de otra manera. Soy instinto con honor. "El coche de producción te recoge a las diez". La noche más fría de mi vida la pasé en Ávila, nunca volví. Adoro el verano, lo mejor, un paraíso. Este animal de calor lo tiene claro, sí. Con playa o sin ella, a ritmo de Beach Boys, o lo que sea, sudando la gota gorda, rejuvenezco. "Oh no, not I, I Will survive. Oh, as long as I know how to love, I know I'll stay alive. I're got all my life to live, and I've got all my love to give and I'll survive, I will survive, hey, hey". Recuerdo a una profesora en Psicometría: "Lo importante es hacer el camino". Nunca imaginé que fuera a recorrer tantos y de golpe, a modo pulpo, inaudito. Nicotina con adrenalina, en parapente. Y la fauna humana, esa de la que no puedo ni quiero prescindir, la sal de la vida. Oye, la ruta sesenta y seis, en Cadillac rosa, en vez del camino de Santiago, lo prefiero. Sin maletas, muñeca, como dos guarros, pasta gansa y lo que traiga el viento. Éxito asegurado. "Well it goes from St Louis, down to Missouri, Oklahoma city looks oh so pretty. You'll see Amarillo and Gallup, New México, Flagstaff, Arizona don't forget Winona, Kingsman, Barstaw, San Bernardino". No te digo, sonando Logical Song, el genio de la botella sentado en la cocina, tomando nota.

Imagen: Ruta 66/viniloscasa.com


The Logical Song

Entradas populares